En Directo desde la Necrópolis

Alguna veces pienso, si, en serio. Hago el esfuerzo y me pongo a pensar. Es un ejercicio relativamente difícil, sobre todo para mi que tengo algún tipo de trastorno del pensamiento y, la mayor parte del tiempo, estoy pensando, lo que vulgarmente se conoce como; tontás.

Una veces el pensamiento surge espontáneo, de una sensación o un sentimiento que me llega de repente. Otra veces, el pensamiento se convierte en reflexión debido a que leo, o veo, o recuerdo algo que sucedió, o algún medio me recuerda algo que ocurrió y yo había olvidado. Este es el caso de mi reflexión de hoy.

Viendo el telediario de no se que cadena vi una noticia que sucedió hace algun tiempo, pero que gracias a un medio tan aleatoriamente bueno y malo como es internet, pude recuperar. Y esto me suscitó la siguiente reflexión: ¿Cuándo fue el momento en el que dejamos de ser simples simios y nos convertimos en el ser humano?, o bueno, reformulando la pregunta para el caso, ¿Cuándo dejamos de ser animales para convertirnos en auténticos y genuinos hijos de la gran puta, de hecho o en potencia?

El caso es que dos jóvenes entrán en un cajero donde está durmiendo una méndigo, estos, aprovechando de que son jóvenes, gallardos y superiores tanto moral como económicamente, la insultan y le dan una paliza y se marchan, tal que así. Pero hay no acaba la cosa, viendose superados físicamente por la pobre mujer sin techo, vuelven mas tarde con refuerzos, nunca se sabe, y le vuelven a dar otra paliza, pero claro, suponieron que en la grabación se seguridad que lo estaba firmando todo, eso quedaría muy poco imaginativo, así que uno de ellos cogió una garrafa de disolvente industrial y le pego fuego con ella. Cuando los bomberos fueron avisados y consiguieron apagar el incendio, ¡sorpresa!, debajo de todas las llamas estaba el cuerpo inconciente de esta señora, que murió unos cuantos días depués.

El caso es, que llegados a este punto, el lector se hace una pregunta, ¿qué demonios debió de haberles hecho esa señora para que los tipos estos actuaran así? Eso es lo mejor del caso, el asunto es que estas "personas", se aburrían, es decir, lo hicieron para divertirse, lo que pasa es que se les fue de las manos. Y uno piensa, claro, cuando uno está echando un líquido inflamable encima de una persona y luego se enciende un cigarrito para tomar un descanso, es normal que un poco de ceniza ardiente prenda todo aquello, un fallo, algo normal, somos humanos. Lo dicen como si insultar a una persona, pegarle y despues rociarla con líquido inflamable fuera algo normal, que se le puede ir a uno de la manos. Y depués pienso, ojala se la vaya la mano a alguien y te sodomice con el grifo de la ducha en el puto reformatorio, cabrón.

Por eso, y por otros motivos que si me da la gana contaré otro día, a veces me entran ganas de volver a la selva de donde salimos, rodeados de salvajes y pacíficos monos. Al menos, ellos no me pegarían fuego cuando estoy durmiendo.